La masticación es una terapia. Simple, barata y muy beneficiosa para nuestra salud y nuestra personalidad. ¿Quieres saber porqué?
EL PODER DE LA MASTICACIÓN
Todas sabemos que es importante masticar sin embargo no solemos prestarle mucha atención y comemos de forma rapida, desordenada y sin pensar.
Las culturas tradicionales de todo el mundo enseñan la importancia de comer despacio y conscientemente. La medicina ayurveda, por ejemplo, compara el estómago con un fuego. Cuanto mayor es el fuego digestivo (agni), mejor digestión y asimilación de nutrientes.
Y para mantener ese fuego digestivo fuerte, es imprescindible una buena masticación y elección correcta de alimentos (que incluye evitar alimentos fríos, exceso de carbohidratos y proteinas animales).
Debemos intentar tener este fuego en equilibrio constate, ni muy débil ni demasiado vivo. Si el agni está muy débil, los alimentos se mantendrán más tiempo en el sistema digestivo creando problemas intestinales, cansancio y sobrepeso. Si está muy vivo, tendremos problemas de ardor,
Beneficios de una buena masticación
Los trastornos digestivos comunes tales como la acidez o indigestión, reflujo ácido, las úlceras, intestino irritable, la colitis, y el cáncer se mejoran directamente con las técnicas de masticación y mindfullness eating. Increible, ¿no?
Además las personas que practican una buena masticación sanan más rápido, viven más tiempo y parecen más jovenes. ¿Por qué?
La masticación es una etapa decisiva en la eficacia del proceso digestivo y en especial de los carbohidratos y proteinas. Una buena masticación nos beneficia porque:
- se desintegra el alimentos lo que favorece la digestión y por lo tanto ayuda a asimilar y absorber mejor los alimentos.
- se estimula la producción de saliva que contiene lubricante, enzimas que pre-digieren los hidratos de carbono y hormonas que estimulan el timo.
- Sacia el hambre por lo que comes menos alimentos y… te que ayuda a reducir peso! ;-).
- Fortalece los dientes y las encías.
- Permite absorber y propagar mejor la información, pensamientos y acciones.
- Evita flatulencias, gases y digestiones pesadas.
- Genera relajación y fomenta la claridad mental.
- Nos proporciona un estado de energía y vitalidad estable.
- Mejora el sabor de lo que comemos
EL PROCESO DIGESTIVO
El proceso digestivo empieza antes de comer. En el mismo instante en que la vista o el olfato son estimulados, el cerebro envía la orden de puesta en marcha al estómago. Esto ocurre Incluso cuando tenemos cualquier pensamiento referente a la comida.
Sigue el proceso de incorporar la comida en la boca y su masticación. Luego viene la digestión y asimilación de los nutrientes para finalmente eliminar todo aquello que no sirve para el organismo.
El proceso de una digestión completa puede durar de 24 a 48 horas. Paralelamente están funcionando todas sus fases ya que comemos de tres a cinco veces al día en menor o mayor cantidad.
La salud del mecanismo y por lo tanto de la nuestra, depende del equilibrio entre lo que entra y lo que se elimina, y más propiamente entre lo que verdaderamente se digiere y asimila que es lo que de verdad nos nutre.
¿Cuánto hay que masticar?
Dependiendo del alimento, lo ideal es masticar un mínimo de 80 veces y llegar hasta 150 (especialmente si tienes alguna enfermedad o si estás con sobrepeso).
Pero puedes empezar con unas 20 o 25 masticaciones por cada bocado e ir aumentando a medida que te vayas acostumbrando. Los cereales, pastas y pan integrales masticados un mínimo de 30 veces evitará tus ansias por comer dulce.
Una comida bien masticada llega a cualquier elemento y partícula de nuestro cuerpo. También nos conecta con la energía de la naturaleza y el Universo. La boca es algo así como un reactor nuclear que puede cambiar un elemento en otro y también puede cambiar nuestra vida.
Sé que para algunas personas esto puede sonar un poco radical, pero yo lo he experimentado muchas veces. Veo resultados positivos en las personas después de un par de semanas de buena masticación. A menudo veo una mejora en la piel, en el peso y en muchos problemas digestivos que desaparecen.
¿Cómo hay que masticar?
Aunque la respuesta te pueda resultar obvia, te lo recuerdo por si te dejas algún paso:
- Toma pqueñas porciones de comida.
- Mastica despacio y de forma continua.
- Por toda tu atención en la masticación y nota cómo se transforma la textura y el sabor del alimento a medida que vas masticando.
- Mastica hasta que la comida se transforme de sólida a líquida (algunos alimentos necesitarán más masticaciones que otros).
- Saborea los alimentos y disfruta de lo que comes.
- Termina de masticar y tragar antes de poner otro bocado en la boca.
- Espera a beber hasta que te hays tragado la comida.
ACOSTUMBRÁNDOTE A MASTICAR MÁS Y MEJOR.
A continuación te enseñaré una técnica para comer conscientemente y masticar a fondo.
Es un ejercicio sorprendente y con resultados increibles. Muchas de mis alumnas empiezan así la práctica de la alimentación mindfullness. Yo incluso añado música especial a la hora de comer y repito mentalmente afirmaciones de éxito, amor o gratitud para mejorar la experiencia del comer consciente.
- Haz este ejercicio un dia que tengas tiempo y estés tranquila.
- Prepara un plato de comida con diferentes alimentos y cortados en pequeños trozos.
- Sientate en la mesa delante del plato y tápate los ojos con un pañuelo o un antifaz para dormir.No pongas la tele ni ninguna otra distracción psible.
- Empieza a comer masticando lentamente y siente cómo se van transformando los sabores en la boca, cómo cambia la textura y cómo te sientes al comer.
- Sigue comiendo hasta que ya te sientas satisfecha.
Imagina una gran mesa de más de veinte personas todos comiendo en silencio, con calma, y con gratitud y paz. La experiencia es muy placentera y gratificante. Los italianos dicen: “Quando si mangia, no si parla”, que significa: “Cuando se come, no se habla.”
El resultado es la vitalidad, la salud, la claridad mental y una vida más plena. ¡Ah, y más delgada!
¿No te parecen razones suficientes para empezar a masticar más y mejor?
Mónica
Tu mentora de alimentación saludable y consciente
Si deseas saber más sobre la masticación, sus beneficios y como influye en nuestra personalidad, puedes ampliar tus conocimientos con los cursos on-line:
Genial post Mónica. Soy terapeuta y me encuentro muchos problemas digestivos crónicos debidos a una mala masticación de los alimentos. Muchas veces he observado que estas personas desarrollan una hipoclorhidria severa. Lo peor de todo es que les dan el omeprazol como solución al problema, sin tener en cuenta cual puede ser el origen.
Un post muy importante, y que todos nosotros deberíamos ser más conscientes cuando comemos. 1 abrazo.