La vida nos trae situaciones (bueno, las atraemos). En cualquier caso, nosotras elegimos qué hacer y cómo gestionar las vivencias diarias. Y aunque no te lo creas, es algo muy parecido a la digestión de la comida.
¿Cómo digieres la vida?
Quizás no sabes la información que puedes sacar sobre ti misma simplemente observando la forma cómo comes y cómo digieres los alimentos. ¿A que suena genial?
Pues si, y ahora te lo voy a explicar. Porque comer no sólo tiene implicaciones en nuestra salud física sino que nos ayuda directamente en nuestro auto-conocimiento.
Las fases de la digestión y de la vida
Como he comentado, la digestión habla de nosotras. Tal como comemos y cómo es nuestra digestión, es el vivo reflejo de nuestra forma de elegir, gestionar y responder ante las situaciones de la vida.
1. ELECCIÓN DE LO QUE QUIERES COMER = ELECCIÓN DE CÓMO VIVES
Antes de comer pensamos y escogemos aquello que vamos a comer… o al menos así debería ser. Pero quizás eres de las personas que no piensan, sólo coges lo primero que encuentras y directamente lo comes. No importa si es insano, si no te sienta bien o si no tienes hambre, simplemente lo comes sin ser consciente de cómo te puede afectar.
¿Esto es también lo que haces ante las situaciones de la vida?. ¿Escoges la primera propuesta que te hacen, aceptas y crees lo primero que te cuentan o dices sí a todo a pesar de querer decir no? ¿Te crees todo lo que te dicen y aceptas que es veraz? No vale cualquier comida, noticia, propuesta o idea. Debemos elegir escuchando las señales del cuerpo y la intuición.
2. MASTICACIÓN = COMO VIVES LO QUE ELIGES
Una vez el alimento en la boca, los dientes rompen el alimento por fuera y la saliva los rompe por dentro. La digestión de los hidratos de carbono o glúcidos, como el pan, bollería, pastas, patatas, etc. se realiza en la boca debido a la presencia de la enzima ptialina y queda momentáneamente detenida en el estómago, donde se digieren principalmente las proteínas.
Pero si eres de las personas que no masticas sino que tragas rápidamente, nos indica que eres una persona impulsiva, que dice que si a todo sin pensar con anterioridad y que sueles actuar rápido. Por el contrario, si eres de las que comes despacio, masticas bien y con tranquilidad significa que eres una persona reflexiva, que no sueles aceptar, disfrutar todo lo que te llega en la vida y sabes decir no a lo que no es bueno para ti.
3. DIGESTIÓN = COMO GESTIONAS TU VIDA
el estómago es donde van a parar los alimentos una vez masticados entrando en contacto con el ácido clorhídrico. Este líquido de gran poder abrasivo, tiene por función deshacer las proteínas (carne, pescado, legumbres, frutos oleaginosos, tofu, seitán, etc.). Si nuestra dieta es muy rica en estos alimentos producimos mayor cantidad de ácido clorhídrico y si fuera excesivamente abundante en proteínas se podrían llegar a agredir las paredes del estómago.
En nuestra vida la digestión es similar a cómo analizamos y resolvemos los problemas a los que nos encontramos. Mientras unas personas rapidamente encontrarán una solución y no se preocuparán más, otras irán pensando y pensando en qué está pasando y porque hay esa situación en su vida.
¿Tienes digestiones lentas? Mira como resuelves los problemas de tu vida y entenderás porque digieres mal.
4. ASIMILACIÓN = CÓMO ACEPTAS LAS SITUACIONES DE TU VIDA
Una vez batidos y mezclados los alimentos en el estómago pasan al intestino delgado. En la primera parte del intestino delgado (duodeno) confluyen los líquidos del páncreas, vesícula biliar y los propios jugos intestinales, que terminan de digerir los glúcidos y las grasas. Si hemos tomado muchas grasas la vesícula biliar se contrae y liberará más bilis para poder digerirlas.
Es en el intestino delgado donde las vellosidades intestinales se encargan de absorber los nutrientes de los alimentos que tomamos. En el intestino grueso, gracias a la flora intestinal, acabamos de aprovechar el resto de nutrientes posibles gracias a la flora intestinal. Por eso es tan importante mantener la microbiota (bacterias beneficiosas del intestino) en perfecta salud para la asimilación de todas las sustancias.
¿Cómo asimilas las dificultades vividas y la solución entontrada? Puede que te hayas tragado y resuelto un tema que no te satisfacia pero no estás contenta contigo misma con el resultado o la solución encontrada. Te cuesta asimilar la situación y te sientes insatisfecha.
También puede que tengas un exceso de información o de estrés y entonces el cuerpo no puede asimilar más. Lo vemos en personas que a pesar de llevar una alimentación correcta, tienen carencias nutricionales que llevan a la anemia, depresión, ansiedad, nerviosismo, fatiga, miedo, etc.
5. ELIMINACIÓN = CÓMO SUELTAS LO QUE NO TE GUSTA O NO SIRVE EN TU VIDA
La última fase de la digestión es la absorción de agua quedando sólo la materia de desecho. Esta tarea la realiza el intestino grueso y el colon. El intestino grueso funciona gracias a los movimientos peristálticos los cuales se ven estimulados por la presencia de fibra vegetal. La fibra aporta volumen y presiona los intestinos para que se muevan y permita avanzar las heces hasta su eliminación.
Dependiendo de toda una serie de factores las heces pueden estar de seis a veinte horas esperando para ser eliminadas, aunque hay casos donde el tiempo de retención es superior, produciendo estreñimiento, gases y malestar. ¡Glups! Eso no suena nada bien. Y aquí es también el reflejo de cómo dejamos ir o soltamos los problemas y preocupaciones de la vida. Si te cuesta olvidar, si eres de las que acumulas ropa, papeles, objetos o sentimientos es muy probable que tengas estreñimiento, sobrepeso, edemas e inflamación. Retienes, acumulas y no quieres soltar, tirar. Puede que seas una persona controladora y exigente. No quieres que se te escape nada y menos “cagarla”.
¿Sorprendida? Pues no dejes de leer el blog porque hay más.
Un abrazo
Monica
Tu coach nutricional y experta en alimentación consciente y saludable.
Hola Monica. Me ha encantado la relación entre el proceso digestivo y nuestra vida. Este post es fácil de entender y conecta perfectamente con el lector. Para todos aquellos que busquen una vida más saludable, es bien sabido que cuidar del sistema digestivo es sinónimo de bienestar y salud. Este estilo de vida es compatible con el entrenamiento y el ejercicio físico. Yo voy al gym curves para mujeres https://www.curves.eu/es. Es muy recomendable si se busca una estilo de vida saludable y productivo.
Un saludo y muy buen trabajo!